Fuente: beincrypto
El valor del crimen vinculado a las criptomonedas casi se duplicó el año pasado a $14 mil millones, aumentando a 79% desde $7,8 mil millones en 2020.
Aproximadamente $10 mil millones en criptomonedas están actualmente en manos de direcciones ilícitas, a partir de la primera semana del nuevo año, según el último informe de Chainalysis, el cual define las direcciones ilícitas como monederos asociados con actividades delictivas como el robo de criptomonedas en forma de estafas, ransomware y esquemas Ponzi.
A pesar de la cifra récord, las actividades ilícitas constituyeron un mero 0,15% de los $15,8 billones en volumen total de transacciones de criptomonedas el año pasado, un aumento de 550% con respecto al año anterior. Sin embargo, las cifras aún podrían aumentar, ya que la firma de análisis incorpora otras direcciones vinculadas a transacciones ilegales en el monto total.
Chainalysis informó que el 0,34% de las transacciones cripto en 2020 se habían asociado con actividades ilegales, que posteriormente aumentaron a 0,62%. Pero aparte de un valor atípico extremo, en la forma del esquema Ponzi PlusToken multimillonario en 2019, la proporción de transacciones cripto asociadas con el crimen muestra una tendencia a la baja.
Un nuevo escenario con las DeFi
A medida que los volúmenes de transacciones en las finanzas descentralizadas aumentaron un 912% el año pasado, el informe destacó como un nuevo escenario en el que los hacks han florecido cada vez más. Si bien los $162 millones en criptomonedas robados de las plataformas DeFi en 2020 representaron el 31% del total robado ese año, esa cifra fue un aumento de 335% con respecto a 2019. En 2021, esa cifra aumentó 1,330% a $2,3 mil millones, según Chainalysis.
“El aumento de la delincuencia relacionada con DeFi es un ejemplo de cómo los criminales suelen explotar las nuevas tecnologías,” dijo el jefe de investigación de Chainalysis, Kim Grauer, a Reuters. “Cuando DeFi comenzó a crecer este año, vimos grandes aumentos en los protocolos de DeFi que se utilizan para lavar dinero, así como en los protocolos de DeFi que son las víctimas reales de hacks como la piratería”.
